Para los principiantes en el mundo de la joyería, puede resultar confuso entender las diferencias entre el oro laminado y la chapa de oro. Ambos términos se utilizan como sinónimos en la industria, pero representan procesos diferentes y una cantidad de oro distinta.
¿Qué es la chapa de oro?
La chapa de oro o baño de oro consiste en una fina capa de oro que se ha aplicado sobre otro metal. Esto se lleva a cabo a través de un proceso electroquímico llamado “galvanoplastia”. Este proceso consiste en depositar capas de oro en un objeto receptor, en este caso puede latón, zamak u algún otro metal.
A modo de resumen, el proceso es el siguiente: primero, tomas una pieza de metal que quieres cubrir como: aretes, collares, anillos o cualquier otra pieza de joyería. Luego, sumerges esa pieza en una solución con partículas de oro suspendidas en agua. Después, aplicas electricidad, y el oro se adhiere a la superficie de la joya a través de un proceso químico. Esto crea una capa delgada de oro real sobre la pieza, haciéndola lucir dorada y elegante.
Como sabrás en Divain Joyería, la gran mayoría de diseños pueden ser chapeados en oro, ya que el proceso permite llegar a cualquier parte de la pieza. Es por eso, que nosotros utilizamos esta técnica como base para nuestros productos.
¿Qué es el oro laminado?
El oro laminado es una técnica que permite aplicar una capa mucho más gruesa de oro sobre otro metal, como la acero o el cobre. La clave es que esta capa de oro está unida permanentemente al metal base, lo que significa que no se desprenderá ni se desvanecerá con el tiempo, siempre y cuando se cuide adecuadamente.
El proceso de laminado implica fusionar mecánicamente el oro con el metal base, generalmente mediante presión y calor. Esto crea una capa sólida de oro que es mucho más gruesa que la que se obtiene en la galvanoplastia, donde el oro es mucho más delgado y se adhiere de manera más superficial.
El resultado es una pieza que tiene la apariencia y el brillo del oro sólido, pero a una fracción del costo. Por supuesto, la cantidad de oro utilizado y su calidad afectarán el valor y la durabilidad del laminado. Es importante recordar que el oro laminado no es lo mismo que el oro sólido, pero es una excelente opción para obtener ese aspecto dorado sin romper el banco.